Tyge Ottensen Brahe, conocido por su nombre latino Tycho Brahe, fue un astrónomo danés del siglo XVI, considerado el más importante con anterioridad a la invención del telescopio. Sus aportaciones más notables fueron sus teorías heliocéntricas (donde el Sol y la Luna girarían alrededor de la Tierra, fija e inmóvil, y el resto de planetas, en torno al Sol) y el estudio de la supernova Stella Nova, además de crear el primer instituto de estudios astronómicos en el observatorio de Uraniborg.
Convertido en un celebridad gracias a su trabajo para el rey Federico II de Dinamarca, en 1597, aceptó la invitación del rey de Bohemia y emperador alemán Rodolfo II de Habsburgo, para que trabajase, entre otros, con su alquimista de cabecera, Johannes Kepler, que se convertiría en el heredero de sus cálculos y en el sucesor de sus estudios.
Esta colaboración, que se inició en febrero de 1600, acabaría en octubre del año siguiente ya que, cuatro años más tarde de su llegada a Praga, Tycho Brahe encontraría la muerte de la forma más absurda: para no ofender al emperador por una falta de protocolo, levantarse de la mesa estando el monarca sentado a la misma, se negó a ausentarse durante un largo banquete para ir a hacer sus necesidades; como consecuencia, la historia cuenta que le explotó la vejiga y cayó gravemente enfermo por uremia, es decir, por la acumulación en la sangre de las toxinas que se eliminan a través de la orina. Brahe moriría delirando once días más tarde.
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